Maldron Hotel Kevin Street Dublín

me encantó quedarme en maldron. la ubicación es perfecta, cercana al centro de la ciudad y en una zona tranquila. el personal, especialmente el personal español y la italiana, fue super amable y servicial. la habitación estaba siempre limpia y la cama era muy cómoda. además, tenían tetera en la habitación con café y té.

Super recomendado

Visitamos EPIC, donde descubrimos la historia irlandesa de una forma increíble. Además, la destilería Jameson fue una experiencia única. ¡Pero lo mejor fue hospedarnos en un hotel alucinante que está cerca de todo!

Solo pediría una mejor oferta de entretenimiento nocturno!

Este hotel es una excelente opción para alojarse en la ciudad. Está muy bien ubicado, en una zona agradable y muy cerca del centro de la ciudad. Además, cuenta con habitaciones cómodas y limpias, y un personal amable y atento. El desayuno es variado y de buena calidad. Además, la vista desde algunas habitaciones es espectacular. También hay supermercados, cafeterías y bares cerca, lo que hace que sea muy conveniente para los huéspedes.

No cuenta con suficiente espacio de almacenamiento en los armarios de las habitaciones.

La ubicación y la comida eran súper chulos, tenía vistas a la ciudad. El cuarto era cómodo, la cama bastante buena. Tenía un montón de facilidades, incluyendo una caja fuerte personal, una zona de estar, una plancha y tabla de planchar.

Ubicación ideal, frente a la catedral. Cama cómoda y aire acondicionado perfecto. Botellas de agua y té y café gratuitos. Vistas impresionantes y desayuno completo

Tuvimos una estancia de 2 días tranquila.

Como familia, visitamos el Dublin's EPIC, donde quedamos fascinados por las 20 galerías temáticas y el centro de historia familiar. La manera en que la historia cobra vida es impresionante, especialmente para los niños.

A mis hijos les habría encantado tener un área de juegos para niños en el hotel.

El desayuno fue excelente, con una buena variedad y calidad. El hotel está ubicado en una zona muy cercana al centro de la ciudad y al centro comercial. El personal del hotel fue amable y atento durante toda mi estancia.

No. No tengo comentarios negativos sobre esta estancia.

Un hotel moderno, habitaciones bien planificadas, el personal es muy complaciente. El servicio es decente, el desayuno es saludable.

Había una ubicación y un personal agradables, y todo estaba muy limpio. Las camas eran demasiado grandes aquí, sin embargo, fue una estancia fantástica en general. He visitado su restaurante Grain Grill un par de veces.

el hotel está muy bien ubicado, cerca de la Catedral de San Patricio y a poca distancia del centro. El desayuno es completo y el personal es muy amable y atento.

Falta de instrucciones y detalles de limpieza.

Todo estaba muy limpio, he disfrutado un montón de la ubicación y el personal, eran bastante buenos.

Ubicación céntrica. Check-out rápido sin filas. Personal amable y atento. Habitación confortable y limpia.

Nos encantó nuestra estancia en este hotel bien situado en Dublin. La cama era muy cómoda y teníamos una tetera en la habitación con café y té. También apreciamos el trato amable y servicial de la recepcionista Mar, quien nos ayudó con todas nuestras necesidades durante nuestra estancia. En general, recomendaríamos este hotel.

Propiedad moderna, todo estaba ordenado, el ambiente y la comida eran ideales. Las camas eran cómodas, y había una caja fuerte, una zona de estar, una plancha y tabla de planchar en la habitación. Me ha gustado la decoración cómoda.

El Maldron Hotel Kevin Street en Dublín ofrece modernas y acogedoras habitaciones con camas cómodas y excelentes vistas. El restaurante Grain & Grill ofrece deliciosos desayunos de vitalidad y variadas opciones para almuerzo y cena que satisfacen todos los gustos.

A pesar de las comodidades, experimenté un problema con el olor desagradable en la habitación que no fue atendido de manera oportuna. Aunque el personal finalmente resolvió el problema, el primer inconveniente afectó mi experiencia inicial en el hotel.

Las instalaciones son modernas y están ubicadas al lado de la catedral de San Patricio y el centro, a 5 minutos caminando. También destacaría el buen trato recibido por la recepcionista Mar, una chica española muy agradable y servicial, que nos solucionó varios inconvenientes durante nuestra estancia y nos recomendó actividades para hacer en Dublin.

Me sentí muy bien atendido, no tengo ninguna razón para quejarme.